jueves, 12 de abril de 2007

UNA DE CAL Y OTRA DE ARENA

Ayer le dieron, a mi hermano de 7 añitos, la maleta viajera. Es una maleta con 6 cuentos que debe leer y mi madre tiene que hacer un comentario sobre que nos han parecido a la familia, en mi caso pone: "A mi hermana el libro que más le ha gustado es ^Pancho^ y el que menos ^El gallo Quirico^ no me extraña, como ella es vegetariana le ha llegado al alma" La verdad es que es cierto pero no es que me halla llegado al alma, es que me hizo mucha ilusión el libro de Pancho, ¡no me pude creer que por fin viera un libro con mensage antiespecista! y al leer El gallo Quirico, sentí tanta repugnancia hacia el sistema educativo.
PANCHO:

En la selva, donde la hierva se viste de flores y las mariposas vuelan, nació Pancho, un lindo elefante gris. Pancho era más pequeño que su madre y mucho más pequeño que su padre. A los pocos días de nacer ya se había hecho amigo del mono y del pájaro, se escondía del león... y, como su padre la había aconsejado, se mantenía lo más lejos pasible del hombre.
Pero los hombres tenían algo que a Pancho le gustaba mucho: una tela de cuadros. Con aquella tela fabricaban capotas para camionetas, hacían faldas y pantalones... ¿Pancho suspiraba por aquella tela.
Su padre insistía: ¡Aléjate del hombre!
Ahora Pancho ya tiene su tela de cuadros
Trabaja en un circo.
Duerme en una jaula.
Y sueña con la selva y con sus padres.
Casi fin...


EL GALLO QUIRICO:


Había una vez un gallo, el Gallo Quirico, que estaba invitado a la boda del tío Perico.
Como era muy presumido, se arregló bien las plumas, la cresta y el pico y se puso en camino.
En medio de una boñiga se encontró a un gusanito, que le dijo:
- ¿Adónde vas, gallo Quirico?
- A la boda del tío Perico
- ¿Puedo ir contigo?
- Te llevaré, pero dentro de mi buche.
Y de un picotazo, el gallo Quirico se lo tragó, sin darse cuenta de que el pico se manchó.
El gallo Quirico siguió su camino y, como era muy presumido, fue a mirarse al río. Al verse, muy preocupado, dijo:
- Con el pico cochambroso estoy horroroso. Buscaré quien me lo limpie.
Pasó cerca de una huerta y preguntó a una lechuga:
- Lechuga, ¿Querras limpiarme el pico, que voy a la boda del tio Perico?
- Claro, te lo limpiaré, pero antes dime:¿Dónde está el gusanito, que hoy aún no lo he visto?
-Yo qué sé; si lo he visto, ni me acuerdo.
Y desde dentro del gallo salió la voz del gusanito, que los dejó asustados:
- Lechuga, estoy aquí en el buche del gallo Quirico, que me lleva a la boda del tío Perico.
Entonces chilló la lechuga con ganas de darle una paliza:
¿Conque querías engañarme, mentiroso? Pues pasa para acá que sin plumas te vas a quedar.
Casi volando, se escapó de allí el gallo Quirico, con la mancha en su pico y no paró hasta que se encontró delante de una cabra.
Se recompuso enseguida y le preguntó:
- ¿Cabrita querras comerte a la lechuga, que no quiso limpiarme el pico para ir a la boda de tío Perico?
- Claro, pero antes dime. ¿Dónde está el gusanito, que hoy no lo he visto?
- Yo que sé; si lo he visto ni me acuerdo.
Y desde dentro del gallo salió la voz del gusanito:
- Cabrita, estoy aquí en el buche del gallo Quirico, que me lleva a la boda del tío Perico.
Y la cabra muy cabreada, dijo:¿Conque querías engañarme, patrañero?
Te vas a enterar con la que te voy a dar. Y lo embistió de tal manera que el gallo Quirico salió disparado hasta darse contra un palo. [...]
Se encontró con la lluvia y le preguntó:
- Lluvia, ¿Querrás apagar el fuego, que no quiso quemar al palo, que no quiso pegar a la cabra, que no quiso limpiarme el pico para ir a la boda de tío Perico?
- Claro, pero antes dime: ¿Donde está el gusanito?
-Yo qué sé; si lo he visto, ni me acuerdo.
Y desde dentro del gallo salió la voz del gusanito:
- Lluvia, estoy aquí en el buche del gallo Quirico, que me lleva a la boda del tío Perico.
Entonces la lluvia canturreó:¿Conque querías engañarme, embustero? Pues para tí unchaparrón entero.
[Aquí viene lo bueno]
Empapado y destrozado, llegó el gallo Quirico a la casa del tío Perico.
Llamó a la puerta y abrió la cocinera, que al verlo pensó:
- ¡Valla gallo tan curioso! ¡Dará un guiso apetitoso!
Lo cogió del pescuezo y se lo llevó a la cocina.
Desplumado y destripado, dio un suculento arroz guisado.
Y lo sirvió en el banquete, para deleite de toda la gente.
Y así fue como el gallo Quirico participó en la boda del tío Perico.
Si ya de por sí el cuento es algo agresivo, el final es macabro de narices... ¿y estos son lo valores que se enseñan en la escuela? Luego nos llaman a los veganos raros... Tenemos sentimientos y valores morales, que es distinto...

5 comentarios:

Anónimo dijo...

...

Helena y Conchi dijo...

Así es el sistema educativo, que supuestamente lucha por inculcar en los niños y niñas valores como la justicia, el respeto etc y al tiempo te muestra que matar (por lo tanto no respetar) y utilizar a los animales no humanos es lícito y hasta "divertido" (la risa y la diversión nunca pueden/deben estar vinculados a la discriminación, el dolor ni el asesinato).
Por cierto el cuento de Pancho...¡Precioso!.
Enhorabuena por tu blog, nos gusta leerte!
Un abrazo!

Conchy dijo...

Es horrible, pero muy real. Yo, que ahora soy vegana (y muchos como yo)y hemos crecido en un entorno lleno de cadáveres y de maltrato que pasabamos por alto. Hemos visto deshollar animales muertos, conejos, pollos, peces, perdices, hemos visto abrasar vivos a los cangrejos, nos han dado hígados fritos para cenar porque tenían mucho alimento, hasta puré de cerebro me daba mi madre!!!! Acabas viéndolo tan cotidiano que es parte de tu vida. Nos educan para ser máquinas de matar y destruir... en fín, cuando tomas conciencia sufres mucho, la verdad. Yo sufro por todo el mal que he causado pero mucho más por el que veo que se está desarrollando ahora mismo. El cuento ese es un ejemplo claro. Es de los que te hunden cuando ves la cara de un niño que sonríe al escucharlo. Muy bueno tu blog, me gusta, adelante con él. Conchy

veronica dijo...

hola,

estoy organizando una expo de artistas veganos en Madrid,

esta es la web:
http://www.nimusculosnisecreciones.com

pásate!

abrazo
veronica

Sentido Común dijo...

Me gustó este blog, tiene un buen fondo.