jueves, 29 de marzo de 2007

ALFONSO Y SUS AMIGOS VAN AL ZOO


Este título tenía un trabajo que le mandaron en la escuela a mi hermano. Era un cuento redactado por su profesora y lo que tenían que hacer los niños era leerlo y colorear los dibujos. En este pequeño cuento se desarrolla una historia, en la cual Alfonso y sus amigos iban al zoo, en una excursión de la escuela. Los niños veían a todos esos animales que en una situación de libertad no podrían ver más que en la televisión, en cambio allí se sentían cercanos a estos animales y acariciaban a sus crías, les daban de comer, etcétera. De repente un mono se escapa y los trabajadores del zoo no pueden capturarlo, pero Alfonso y sus amigos lo consiguen y éste vuelve a ser encarcelado.
Gran educación que se da a los niños... Los niños son muy felices en el zoo, pero ¿acaso eso justifica que encerremos animales para esa causa? A nadie le gusta que lo encierren en una jaula y ser observado por cientos de personas al día, estar en un hábitat que no es el propio y estar siempre controlado, que acaricien a tus hijos personas desconocidas e inhibir tu naturaleza.
En cambio los valores morales con los humanos, si son bien mostrados. La pena de muerte está mal, pero condenamos día a día a miles de vidas. La privación de libertad está mal, pero llevamos a nuestros hijos al zoo ¿Acaso estos animales son libres? El asesinato, la violación, el robo, etc. Todo es injusto y por ello se encarcelan y castigan de algún modo a las personas que hacen esto. Pero día a día encarcelamos, matamos, violamos, robamos, a animales inocentes, animales que no hacen nada merecedor de este sufrimiento al que están condenados desde que nacieron, ¿Que injusticia es mayor que ésta? Porque al fin y al cabo no somos tan distintos, pero un humano se merece tales privilegios y cualquier otro animal no. Aún cuando sufren igual que tú y que yo. Y eso es lo que enseñamos a los niños, a ser egoístas, a alimentar nuestro ego, a creernos mejor que otros, a solo respetar a lo que tiene que ver con uno mismo... Así nació Auswitch en Alemania... Pero también existe hoy en día otros campos de concentración: los mataderos, zoos, circos, laboratorios, granjas y un largo etcétera, desde donde no se escuchan sus gritos, desde donde no se huele su muerte, ni salpica su sangre, desde donde no vemos su dolor. Pero ocurre y no debemos darles la espalda, porque esto ocurre por nuestra culpa, por nuestro egoísmo y en nuestra mano está que esto cambie. Aunque tardemos siglos, aunque no lleguemos a conseguirlo, no tenemos que rendirnos.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Estoy en contra de todo tipo de espectaculos con animales.
Todos los animales encerrados estan anulados, estan psiquicamente enfermos.

Anónimo dijo...

ANIMALESS ENCERRADOS A CADENA PERPETUA POR LA CARA NO,NO,NO .

Anónimo dijo...

Totalmente de acuerdo contigo. Desgraciadamente la especie humana es ,sin duda, la que más transgrede el respeto por la vida.

Ánimo con el blog, alguna/os tb pensamos y sentimos como tú. Es fabuloso encontrar a personas con los mismos ideales.


Saludos


Charo